El diseño de las alianzas se ha basado en concebir a Laura y Luis como dos elementos indispensables el uno para el otro, dos elementos que se necesitan para concebirse ellos mismos.
Uno no existe sin el otro. Y esa dualidad se representa mediante el cielo y la tierra. Laura es el cielo, es quien sueña, quien vuela, el elemento intangible. Luis es la tierra, quien ejecuta, el elemento físico que pone las cosas en su sitio.
La tierra se representa mediante un relieve que le da más presencia, más peso y el cielo es la parte rehundida, en segundo plano por ser un elemento más etéreo. En la mayor parte de la alianza el cielo y la tierra se reparten el espacio por igual, pero en dos puntos concretos cada uno llega al extremo del otro, representando la independencia que mantiene cada miembro de la pareja en determinados momentos.
